Turismo responsable for dummies

Por el 20 diciembre, 2011

A nadie ya le cabe ninguna duda sobre la necesidad imperiosa de plantearse el desarrollo turístico sobre la base de la sostenibilidad. Sostenibilidad además soportada en sus tres patas, puesto que si una de ellas falla, el modelo no se aguanta.

A nadie ya le cabe ninguna duda sobre la necesidad imperiosa de plantearse el desarrollo turístico sobre la base de la sostenibilidad. Sostenibilidad además soportada en sus tres patas, puesto que si una de ellas falla, el modelo no se aguanta.Responsible tourism

Pero por mucho que los destinos, y las empresas de consultoría que para ellos trabajamos, intenten incorporar criterios de sostenibilidad en su planificación y desarrollo turístico, de poco sirven si luego los y las visitantes se comportan como Atila, hacen todo lo que no hacen en su casa y se sienten con más derechos simplemente por pagar por dormir y comer. Pedimos por tanto que los visitantes tengan un comportamiento responsable, es decir, que practiquen un turismo responsable. ¿Y qué es el turismo responsable? Os adjunto una definición que he encontrado en el portal de turismo de Nueva Zelanda, que me parece sencilla y clara:

“Responsible tourism is about respecting, protecting and benefiting local communities, cultures and the environment. For travellers, this can mean making holiday choices with these concerns in mind, from the destinations they visit and the way they travel, to the services they choose once they arrive”

Afortunadamente nuestro comportamiento como viajeros está cambiando, pero nunca está de más recordar algunas sencillas prácticas que pueden hacer del turismo un negocio igual de rentable pero menos perjudicial para las comunidades de destino. En la mayoría de ocasiones se plantea el comportamiento responsable para los viajes al extranjero, pero creo que ese comportamiento responsable lo debemos tener tanto en Zambia como en Sanxenxo. Aquí van mis 10 sugerencias:

  1. Compra, come, bebe productos locales: Para mí es el principal mantra. Allá donde fueres, come y bebe lo que vieres, y compra los productos típicos. De esta forma aportarás más a la economía local y limitas el impacto medioambiental por el transporte de productos de otros puntos del país o del extranjero. A más transporte, más consumo de energía.
  2. Respeta el medio ambiente, las costumbres y hábitos de la población local: Creo que esto es de perogrullo, pero mucha gente no lo cumple. Puede que no todo lo que vemos nos guste. Puede que pensemos que lo de nuestra casa es mucho mejor, pero si esta es nuestra opinión simplemente nos la quedamos para nosotros y no volvemos, evitando así molestar o insultar a los residentes locales.
  3. Siempre que sea posible, desplázate a pie, en bicicleta o transporte público. Ya sabemos que el avión es el medio de transporte más contaminante, pero si nadie cogiera un avión a ver qué hacemos con la industria turística canaria. En todo caso, es notorio que uno de los principales problemas de los destinos turísticos es la saturación de vehículos y la escasez de aparcamiento. Los destinos deben trabajar para mejorar la ordenación del tráfico y la oferta de estacionamiento, pero nosotros debemos ayudar yendo a por el pan a pie.
  4. Incorpora criterios de respeto medioambiental en nuestros hábitos de compra y consumo también en vacaciones: Si en nuestro día a día reciclamos, tratemos de hacerlo también en vacaciones. También podemos buscar proveedores que ofrezcan garantías de calidad y de respeto a los derechos humanos y al medio ambiente: certificaciones de gestión medioambiental, compra de productos de comercio justo, compensación de la emisión de dióxido de carbono, programas de ayudas a la comunidad, etc.
  5. Sé cívico, respeta tu lugar de acogida, no hagas allí lo que no hicieras en casa así que nada de pegar gritos a las tres de la mañana, tirar papeles al suelo, hacer caso omiso de las indicaciones de la policía local, etc.
  6. Aprende y enseña: Aprovechemos el viaje para conocer más sobre la cultura e historia del lugar, y transmitamos el gusto por el viaje y por otras culturas a nuestra familia o compañeros de viaje
  7. Por favor, si vas a la playa o a la montaña, no lo dejes todo hecho un estercolero. Las colillas, los papeles de plata, las latas de refrescos, los pañuelos de papel y servilletas…se van contigo.
  8. Vigilemos nuestro aspecto o vestimenta, no ofendamos o molestemos a los residentes entrando en su basílica en bikini, no paseemos por su casco histórico sin camiseta, etc.
  9. Opina de manera justa y meditada sobre tu estancia en el alojamiento y en el destino en cuestionarios y portales de viajes. Ayudará a otros viajeros y al mismo destino, en su continua mejora de su competitividad.
  10. Aprovechemos el viaje para ayudar en alguna causa local de recuperación del medioambiente, donemos sangre, hagamos una aportación económica a alguna ONG, fundación o asociación de la zona que esté trabajando por mejorar la vida de los residentes o por la recuperación del patrimonio artístico o natural.

Turismo responsable for dummies
Como digo, son algunas sencillas medidas, ni son las únicas, ni las mejores ¿Se os ocurren más?

Para los o las que estéis interesadas en leer más sobre turismo responsable podéis aceraros a alguno de los blogs o sitios web especializados:

http://www.ecotumismo.org/
http://turismo-responsable.com/
http://www.foroturismoresponsable.org/
http://www.biospherehotels.org/
http://www.viajesresponsables.com/pages/turismoresponsable
http://www.turismo-responsable.org/

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Juan Desde 12 años

Otra web que podéis visitar es http://turismo-sostenible.net. Muy interesante.

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