Nueva Ley de Turismo de Galicia (II)

Os presento a continuación la segunda parte del breve análisis que he realizado sobre la nueva Ley de Turismo de Galicia. Como veíamos en el primer artículo, en el texto de la Ley se destaca la necesidad de impulsar un desarrollo turístico sostenible. Así, de nuevo en el artículo 54, de Fomento del Turismo, la Xunta se compromete a elaborar programas para potenciar la oferta turística con el fin de alcanzar los tres siguientes objetivos:

1. Impulsar o turismo como medio de desenvolvemento dos valores propios da cultura e da identidade galegas, mediante a posta en valor do patrimonio turístico galego, coa revitalización dos costumes, das festas e das tradicións populares e demais recursos turísticos, coa restauración do patrimonio cultural e coa preservación e potenciación do medio natural.”

También en este mismo artículo se incorpora la necesidad de impulsar una estrategia de segmentación para un mejor desarrollo de los mismos, toda una declaración de intenciones sobre los productos más relevantes, si bien entiendo que dentro de ellos habrá una priorización (en cursiva el texto original traducido al castellano):

• Del turismo rural y de interior,
• Del turismo de costa, para aprovechar el rico litoral gallego, pero sin olvidar su necesaria preservación
• Del turismo cultural, con el aprovechamiento del importante patrimonio de Galicia, y con el fomento de su conservación y puesta en valor
• De los Caminos de Santiago, como un producto en sí mismo que aglutina segmentos de turismo religioso, activo, cultural, espiritual, etc.
• Del turismo gastronómico y enológico, uno de los grandes atractivos tradicionales de Galicia, que ahora se complementan a la perfección con sus cinco Rutas del Vino, dos de las cuales ha sido certificadas por Turespaña como Rutas del Vino de España (Rías Baixas y Ribeiro)
• Del turismo de reuniones, aprovechando los equipamientos MICE con los que cuentan sus ciudades
• Del turismo náutico y marinero, dos segmentos muy diferentes pero que ya se vienen trabajando desde Turgalicia, como por ejemplo con el inventario de recursos de turismo Mariñeiro.
• Del turismo termal y de la talasoterapia, habiéndose incluido una nueva tipología de alojamiento, como son los hoteles talaso.
• Del turismo deportivo vinculado con actividades de contacto con la naturaleza, como senderismo, golf, escalada, rafting, cicloturismo, esquí, hípica y otros.
• Del turismo ecológico.
• Y de cualquier otro segmento emergente en el marco de la continua evolución y de los cambios del mercado turístico

Por último y en tercer lugar, se apuesta por una modernización y profesionalización del sector turístico y de sus infraestructuras, para estimular y mejorar la calidad y competitividad de la oferta turística, a través de numerosas acciones. Entre ellas podemos citar la potenciación de las agrupaciones empresariales, contribuir a la realización de estudios, estadísticas e investigaciones, o  la promoción de programas tendentes a proteger el medio natural de las zonas turísticas para garantizar su desarrollo sostenible (página 23).

Finalmente destacar la incorporación de dos Disposiciones adicionales. La segunda, que pretende potenciar el trabajo en igualdad Traballo en igualdade. Dicha disposición asume la necesidad de colaborar con otros departamentos para eliminar irregularidades y para erradicar la economía sumergida (pág 35).

Por su parte, la Disposición adicional cuarta autoriza al Consejo de la Xunta de Galicia para la creación de la Agencia de Turismo de Galicia. Dicha Agencia asumirá las competencias de impulso, coordinación y gestión de la política autonómica en materia de turismo. No será esta la primera agencia de estas características en España, tras la creación, por ejemplo de la Agencia Catalana de Turismo, la Agencia Balear o Basquetour.

Como resumen podemos hablar de un texto ambicioso que esperemos coadyuve a que el sector turístico siga siendo uno de los motores de la economía gallega, como ha quedado demostrado por parte del Instituto de Estudios Turísticos que desde hace años posiciona a Galicia en los primeros lugares de su Índice de Tendencia de Competitividad Turística por CC.AA.