En los últimos años hemos visto como el deporte se ha convertido en uno de los ámbitos sociales y económicos que más y mejor están aportando a la marca España. El deporte puede vincular un destino turístico con valores de salud, sostenibilidad, competitividad y, según qué disciplinas deportivas, con valores de respeto e integración con el medio ambiente. El turismo deportivo tiene además el beneficio complementario de su capacidad desestacionalizadora para los destinos turísticos. Turespaña lo ha tenido claro y ha contado con iconos deportivos nacionales en diversas campañas. Pero ¿están realmente preparados nuestros destinos para recibir una demanda específica de turismo deportivo, con sus necesidades de equipamientos, alimentación o infraestructuras?
Otra buena fórmula para vincular nuestro destino al deporte son las competiciones. Pero no es necesario pensar en grandes eventos deportivos. Apostemos por un calendario anual plagado de pequeñas competiciones como carreras de montaña, maratones, triatlones, trails, vela, ciclismo…muchas son las pruebas que permiten generar flujos de turismo hacia los destinos y que además aportan dos tipos de visitante; activo (participante) y pasivo (espectador acompañante).
Actualmente algunos eventos de, por ejemplo montaña y aventura, vienen además apoyadas por marcas de ropa muy consolidadas. La Columbia Raid Series 2012 que se celebrará en País Vasco y Navarra; la Trail Aneto by Trangoworld, que se celebra en el Valle de Benasque desde el año 2008; la TRI-NEU Gore-tex, que se celebrará en dos destinos este año, Pirineo Aragonés y Andorra; o la The NorthFace Trans Gran Canaria, son algunos ejemplos de competiciones que tienen lugar a nivel nacional. Estos eventos promocionan a la vez dos marcas: marca deportiva y marca de destino.
En definitiva, el turismo deportivo puede ser una inteligente estrategia de segmentación y posicionamiento de destinos, pero siempre teniendo en cuenta algunos aspectos:
- El destino debe tener una clara y sostenible vocación deportiva
- Seleccionemos aquellas disciplinas para las que podemos tener rasgos diferenciales, y adaptémonos a las necesidades de sus practicantes.
- Pensemos en empresas privadas para la realización de acciones de co-marketing o co-branding como marcas de ropa o equipamiento deportivo, en una clara estrategia ganar-ganar
- Apostemos por un calendario salpicado de eventos, especialmente en aquellos meses de menor ocupación, generando un pequeño colchón de pernoctaciones y flujo de visitantes.
- Midamos el retorno de las competiciones y eventos, en términos de visitantes, ocupación, impacto económico y creación de empleo, etc.
Porque el deporte además de proyectar buena imagen puede ser, en términos económicos, una apuesta ganadora para nuestros destinos turísticos.
Fuente: http://www.gencat.cat/turistex_nou/Destinacions/ca/esportiu/destinacions.html
Entrada original publicada en la revista 02B