En posts anteriores hemos hablado de la importancia y la certificación de los Destinos Turísticos Inteligentes. Esta semana, nos vamos a centrar en uno de los cinco ejes que fundamenta este sistema de gestión: la sostenibilidad.
Como ya sabemos, un Destino Turístico Inteligente es un destino turístico que apuesta por la tecnología, siendo innovador y contribuyendo al desarrollo sostenible, además de ser un territorio accesible para todos.
Los cinco ejes de los Destinos Turísticos Inteligentes
Los cinco ejes que conforman el modelo de gestión de un Destino Turístico Inteligente, basados en la norma UNE 178501 son: gobernanza, accesibilidad, tecnología, innovación y sostenibilidad.Cada uno de ellos constituye un pilar fundamental para lograr un sistema de gestión sostenible en el tiempo, con soluciones sólidas de partenariado.
- La gobernanza hace referencia a la gestión de las instituciones que forman el destino, así como a la transversalidad y coordinación de las mismas.
- La accesibilidad apuesta por la mejora de las infraestructuras tanto públicas como privadas. De este modo, se contribuye a ofrecer la igualdad de oportunidades para el acceso, uso y disfrute de los servicios, bienes, productos, etc.
- La tecnología tiene como objetivo principal satisfacer las necesidades de cobertura tecnológica tanto del turista como del residente, ofreciendo un mejor servicio como destino.
- La innovación pretende introducir o mejorar nuevos servicios, procesos o métodos en el destino.
- La sostenibilidad busca encontrar la cohesión y el equilibrio con la sociedad, la economía local y el medioambiente.
Por lo tanto, vemos que es fundamental establecer una estrategia transversal en el destino. La coordinación y el buen funcionamiento de cada pilar juega un papel clave en la gestión del Destino Turístico Inteligente.
Eje de Sostenibilidad
Como hemos comentado en el apartado anterior, el eje de sostenibilidad de los Destinos Turísticos Inteligentes quiere encontrar la armonía de diferentes columnas que forman el desarrollo sostenible.
En primer lugar, se pretende proteger el comercio local. Por lo tanto, se impulsa el producto y la empresa local, así como la misma cultura. De este modo, un aumento del empleo local irá de la mano, ayudando a evitar la despoblación en ciertos destinos.
Asimismo, se promueven medidas de promoción de la seguridad (edificio o alimentos), así como la formación (incluidas las competencias digitales) o promoción de sistemas de transporte sostenibles.
En segundo lugar, el eje de sostenibilidad hace hincapié en el medioambiente. En este sentido, se quiere conocer el impacto del destino mediante parámetros, a la vez que se establecen sistemas de gestión ambiental (polución, ruido, limpieza, etc.).
En tercer lugar, el pilar social establece una serie de medidas que mejoran tanto la integración étnica y social, como la igualdad de género. Es decir, implica un fomento de la interacción y una mejora de la cohesión en el ámbito social.
En definitiva, el eje de sostenibilidad del modelo de gestión de los Destinos Turísticos Inteligentes ofrece beneficios al empresario, al turista, al residente y al ente público. Por este motivo, es fundamental la transversalidad de todos los ejes y los agentes implicados.
Si quieres conocer más sobre los Destinos Turísticos Inteligentes, no dudes en escribirnos.
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